Cruzamos toda la sierra de Aralar, desde Irañeta hasta el Txindoki. El paseo comenzó muy bien, con una tarde soleada, el paisaje espectacular, la compañia muy agradable. Dormimos en el refugio de Igaratxa. Todo fenomenal de no ser por el final que la niebla se nos echó encima y no pudimos admirar el paisaje tan impresionante de Aralar. Excursión para repetir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario